jueves, 7 de febrero de 2013

ROGER VAN DER WEYDEN


Francisco Amillo Alegre


En nuestra reunión del miércoles 6 de marzo vimos la segunda parte de la charla sobre el genial pintor Roger van der Weyden. Os presento  un resumen de la charla que se centra sobre todo en la biografía del artista. Al final de esta entrada encontrarás un  enlace. Pinchando en él podrás ver las imágenes que vimos en la charla. Los que no pudieron acudir tienen la posibilidad de verlas allí.

 Espero vuestros comentarios.





Al igual que sucede con la mayoría de pintores de la escuela de los Primitivos Flamencos, desconocemos muchos datos de la biografía de Roger van der Weyden, especialmente de la primera parte de su vida. El catálogo de su obra presenta también dudas y problemas.
  
Nacido en Tournai (ciudad francófona belga)  hacia 1399 o 1400, su nombre era Rogier de la Pasture y su padre, Henri de la Pasture, era cuchillero según algunos autores  y escultor según otros.

En 1426 Weyden residía en Bruselas y estaba casado con Isabel Goffaerts, hija de un zapatero de esta ciudad.
  
En 1427, a los veintiocho años de edad, casado y con un hijo, entró como aprendiz en el taller de Robert Campin en Tournai. No era normal entrar a esa edad en un taller gremial sino sobre los doce o catorce años. Es posible que tuviese conocimientos artísticos adquiridos junto a su padre que posiblemente era escultor. En ese caso lo que pretendería sería obtener su título de maestro para poder montar su propio taller. En 1423 se había establecido la norma de que cualquiera que quisiera obtener su maestría franca en una ciudad debía pasar por un aprendizaje de al menos cuatro años junto a un maestro. Weyden cumplió este requisito gremial y así en 1432 pudo abandonar el taller de Campin siendo ya el «Maistre Rogier».

No existe ninguna noticia entre 1432 y 1435, pero es muy probable que residiera en Lovaina ya que el Gremio de Ballesteros de esta ciudad le encargó El Descendimiento (Prado) hacia 1434-1435 para la iglesia de Nuestra Señora Extramuros. Molanus (1553-1585) le denomina «Pictor et cives Lovaniensis».

El 21 de abril de 1435 se instaló en Bruselas con su mujer y sus dos hijos en una casa cerca del barrio de los orfebres. En marzo de 1436 es ya pintor oficial de la villa y cambió su nombre francés «de la Pasture» por el equivalente flamenco: «van der Weyden».

Entre 1439 y 1441 realizó una de las obras que le dieron más fama, Justicias de Herkenbald y de Trajano, que por desgracia se quemó en un incendio del Ayuntamiento en 1695. Podemos suponer cómo era gracias a que fue reproducido en un tapiz conservado en Berna (h. 1460-1470) ya que formó parte del botín de guerra que los suizos arrebataron a Carlos el Temerario tras la batalla de Grandson.
  
En estos años realizó el Tríptico de Miraflores (Staatliche Museen, Berlín), que el rey Juan II de Castilla  regaló en 1445 a la cartuja de Miraflores (Burgos) recién fundada. Eso significaba que era un pintor cuyo prestigio había traspasado las fronteras de su país.

En 1448 su hijo Cornelio entró en la cartuja de Scheut a la que regaló la Crucifixión de El Escorial, así llamada porque el sitio donde actualmente se conserva. La cartuja la había vendido a Felipe II en 1555 a recibiendo dinero y una copia.

En 1450 viajó a Italia para ganar el jubileo romano. El estilo renacentista no le impresionó, si bien su pintura acusará préstamos en lo compositivo.

En 1460, Bianca Maria Sforza envió a su pintor Zanetto Bugatto a Bruselas para que conociera junto a Weyden las características de la pintura flamenca. Regresó a Italia tres años después y la duquesa escribe una carta de agradecimiento a «Rugerio de Tiurnay pictori in Burseles». Es excepcional que un italiano ya formado viajara a Flandes y una señal de hasta qué punto Weyden era un artista muy reconocido.

En 1462 él y su mujer entraron en la cofradía de la Santa Cruz, en la que se agrupaban las personas más significativas de la sociedad de Bruselas. Por esta causa, después de su muerte, se celebraron misas en su memoria en la capilla Saint-Jaques-sur-Coudenberg.

Según los libros de cuentas de la corporación de pintores de Tournai murió en 1464. En dichos libros se le sigue considerando nativo de Tournai y se le llama Roger de la Pasture.


Estilo.
Weyden había heredado el sentido plástico de de su maestro Robert Campin, y realizó un arte de notable expresividad  que enlazaba con la mentalidad de la llamada "devotio moderna". Por eso sus composiciones calaron en la sensibilidad de la época y se copiaron e imitaron durante muchos años. Un ejemplo es la Virgen con el Niño del Museo del Prado de la que había cinco copias en Castilla.
Como pintor flamenco  su estilo se caracteriza por la atención a los detalles, el vivo colorido y el realismo. Como nota propia destaca el dramatismo de sus escenas.
Weyden introduce el paisaje en muchos de sus cuadros. Es un paisaje ejecutado según las normas de su escuela flamenca, es decir, sin apuntes del natural, con estereotipos como rocas, aristadas y sin vegetación, ciudades en la lejanía con torres,  árboles redondeados o en forma de pluma y troncos delgados...
Weyden influyó en muchos artistas de su entorno, como Hugo van der Goes, Hans Memling o Petrus Christus. 


El pintor de la corte de Borgoña.
Fue notable retratista y en 1441, tras la desaparición de Jan van Eyck, el pintor oficial del duque Felipe el Bueno, comenzó a realizar encargos de la corte borgoñona hasta 1459. Se trataba de retratos "oficiales" que debían mostrar la elevada categoría social del personaje. Aunque consta que realizó un retrato de Felipe el Bueno no se conserva ningún ejemplar de su mano. Hay algunas réplicas que se atribuyen a su taller. Como era usual en la época el maestro realizaba un boceto de la cara y el pecho y los detalles más importantes y dejaba a los miembros del taller el acabado. Esta forma de proceder explica las variaciones en la calidad del trabajo.

Como la mayoría de los artistas de su época no se dedicó sólo a la pintura. También realizó libros de miniaturas, aunque el único atribuido con certeza es el de las Crónicas Hainaut. Parece ser que recibió encargos para realizar o policromar algunas esculturas.

Uno de sus encargos más importantes fue El Juicio Final (hacia 1445-1449), encargado por el canciller Nicolás Rolin para el Hospital de la ciudad de Beaune que él había fundado.
También destaca el Retablo de los Siete Sacramentos realizado por encargo de Jean Chevrot, obispo de Tournai y presidente del Consejo del duque.

No hay comentarios:

Publicar un comentario